El día lunes 4 de mayo del corriente año se llevó a cabo en la “Facultad
de Ciencia Política y RRII”, más precisamente, dentro del aula 109; una charla
con Celina Mutti Lovera, reportera gráfica del diario “La Capital”. La
entrevista comenzó unos minutos pasadas las 11 am, contando con el salón lleno de
alumnos que ansiosos esperábamos por jugar, por un momento, a ser reporteros. (Datos secundarios, empezar con informaciones, datos, citas, más contundente )
Celina dio comienzo a la charla hablándonos acerca de su oficio dentro
del diario en el que trabaja hace ya muchos años, contando que actualmente es
la primera vez que hay tantas mujeres trabajando allí y explicándonos que
hace 15 años atrás eran todos hombres (¿Qué dijo?).
Continuó haciendo
hincapié a la relación fotógrafo-periodista dentro de su trabajo, “antes en
general el fotógrafo salía con un periodista, ahora sale solo” nos decía,
agregando que a veces en su profesión no se tiene acceso a ciertas cosas sin la
presencia de un periodista, “le esquivan a la fotografía y a la TV no” añadió. “La
foto es lo mismo que la nota escrita, los fotógrafos no tenemos otra que ir al
lugar, los periodistas pueden recurrir al teléfono” aclaró la fotógrafa, ampliando que para ella cuánto más tiempo pasa
en el lugar a ser fotografiado más rica va a ser la fotografía en sí aunque
también explicó que es preferible no ir siempre a los mismos lugares porque
cuando uno más conoce el contexto, éste más te condiciona en la tarea a
realizar.
Muy amable y mostrándose siempre dispuesta a responder todas nuestras
cuestiones, Celina prosiguió a contarnos más sobre el mecanismo de su ocupación.
El convenio colectivo de prensa impone que se trabaje 6 hs por día, se arman
grupos de personas y se van turnando entre sí, cumplen un calendario en el que
se encuentra organizado el día y el horario que le toca a cada uno ir a un lugar
a cubrir una nota, además de aquellas que van surgiendo en el día. Continuó contándonos que una vez obtenida la fotografía que se quiere utilizar,
antes de ser publicada en el diario, ésta pasa por un editor fotográfico, el
cual es de mucha ayuda para el fotógrafo ya que no todos saben editar fotos.
A la pregunta ¿cuál es una de las cosas más difíciles de tu trabajo?
Celina respondió que para ella una de las cosas más difíciles del
fotoperiodismo es que en una sola imagen debe contar todo lo sucedido. Además reconoció que, en cuanto a cuál es el límite de lo morboso y de
lo ético de un fotógrafo, para ella el
límite es totalmente personal, “uno es siempre consiente cuando sube las fotos
al servidor para que sean publicadas”, nos dijo, contándonos que en su caso
siempre respeta no sacar fotos cuando se lo piden.
Mostrándonos muchos de sus trabajos en un proyector y contándonos numerosas
experiencias y anécdotas de lo que significa ser fotoperiodista, la reportera
gráfica nos aclaró que algo que destaca positivamente de su oficio es que
uno tiene la oportunidad de rechazar cubrir una nota, si ésta puede afectar la
autoestima del fotógrafo. “Yo trato de no ir a accidentes de tránsito (…) trato
de negociar, en eso hay mucho compañerismo” nos dijo.
Por último, ya terminadas las preguntas; Celina nos reveló algunas cosas
sobre sus gustos personales en cuánto al trabajo de ser fotógrafa, como por
ejemplo, que los retratos los prefiere en blanco y negro porque el color
distrae mucho y que lo que más le gusta fotografiar es el deporte aunque no
puede cubrir muchos eventos deportivos por sus horarios de trabajo. Además nos
confesó que si bien ella no estudió la profesión de fotógrafo, se hizo en la
calle aprendiendo de otros fotógrafos que fueron muy generosos con ella. Finalizó la entrevista con una conclusión:
“Si no tuviste la foto es porque no caminaste lo suficiente, a la foto hay que
buscarla”, expresó.